Contribución a la
_ Cumbre de los Pueblos por la Justicia social y ambiental en defensa de los bienes comunes (Rio+20)
_ Rio de Janeiro, 15-23 Junio 2012 [[Este Cuaderno de Propuestas ha sido preparado por Gustavo Marín con el apoyo de Germà Pelayo y los aportes de Candido Grzybowski, Matthieu Calame, Jorge Romano y Paul Raskin, retomando las presentaciones y el debate consagrado a la economía durante el seminario organizado por IBASE, el Foro por una nueva Gobernanza Mundial (FNGM) y EURALAT en Rio de Janeiro del 10 al 12 de Agosto 2011. Sirvió además como texto de base para el Grupo Temático Finanzas y Economía Justa Sustentable y Solidaria del Foro Social Temático de Porto Alegre del 24 al 29 de Enero 2012.]]
La gravedad de la crisis ambiental actual es expresión de una crisis mas profunda, una crisis civilizatoria del capitalismo moderno basada en la predominancia del mercado desregulado, la especulación financiera, el consumismo desenfrenado, la búsqueda constante de crecimiento, la injusticia económica y la pobreza para muchos. Frente a las actuales y previsibles consecuencias devastadoras de un conjunto de crisis sistemáticas y recurrentes, se impone la necesidad urgente de cambiar profundamente la organización económica y política de las sociedades actuales y abrir paso a un mundo sustentable, justo y solidario.
La urgencia es clara: no se trata sólo de salir del capitalismo, sino además, es preciso cambiar de modelo de civilización. La humanidad ha entrado en un periodo prolongado de transición donde el cambio de civilización no es un recurso retórico, sino un desafío histórico ante el cual están enfrentados los pueblos en el siglo 21.
Para ello hay que empezar por develar y desmontar los mecanismos del modelo capitalista dominante, régimen basado en la apropriación y control privado de la producción y el consumo orientado a maximizar el lucro. Al mismo tiempo, es necesario poner en marcha las alternativas de cambio. Pero, ¿cómo serán los nuevos modelos económicos del siglo 21? Pero, ¿cómo serán los nuevos modelos económicos del siglo 21? ¿Qué nuevos sistemas financieros, productivos, distributivos? ¿Con qué matrices energéticas? Existen muchas ideas y experiencias a escala territorial, regional, de la nueva economía que se requiere. Es preciso dar cuerpo a una visión que articule la dimensión local con la mundial para reforzar los primeros pasos de una nueva economía que los pueblos y el planeta precisan.
Para ello es necesario deslegitimar los mitos de la economía oficial y pasar de la economía neoclásica a la economía política, es decir, a una nueva economía con ideas, conceptos y visiones diferentes que den cuenta de la complejidad de los procesos en curso en este periodo de transición. La economía política debe ser recuperada como una ciencia humana, inexacta, superando los mitos de una supuesta economía inmanente, con leyes inmodificables.